El Semillero de Investigación de Metrología para Fabricación Metalmecánica, adscrito a la Facultad de Tecnología de la Universidad Tecnológica de Pereira, se ha consolidado como un espacio clave para estudiantes interesados en la precisión y el aseguramiento de calidad en la fabricación de piezas en la industria metalmecánica. Este semillero, liderado por el profesor Carlos Alberto Montilla, nació a finales de 2022 con el propósito de brindar a los estudiantes una formación práctica y rigurosa en el campo de la metrología dimensional, un aspecto fundamental para garantizar la calidad en la fabricación de piezas industriales.
¿Qué es la metrología y por qué es importante?
La metrología es la ciencia de las mediciones, una disciplina que, aunque a menudo pasa desapercibida, es esencial para asegurar la calidad y precisión en la fabricación de productos. Desde la concepción de una pieza hasta su producción en serie, cada proceso requiere un control metrológico que asegure que las medidas sean exactas. Sin estas verificaciones, se corre el riesgo de generar errores costosos que pueden afectar la producción completa.
El profesor Montilla, fundador del semillero, lo explica: “si la metrología no es la adecuada, se pueden perder lotes completos de productos y llevar a una pérdida económica importante. Desde que se concibe la pieza, el elemento o la máquina, es necesario contemplar un plan de aseguramiento metrológico para garantizar la calidad dimensional de manera adecuada”.
Un espacio de aprendizaje práctico y colaborativo
El semillero brinda a los estudiantes una oportunidad única de interactuar directamente con equipos de medición avanzados. Para María Alejandra, estudiante de sexto semestre de Ingeniería de Manufactura, lo que hace único a este semillero “es la importancia que le da a las mediciones en la industria, algo que a veces pasa a un segundo plano, pero que en realidad es crucial. Aquí, no solo aprendemos la teoría, sino que tenemos la experiencia práctica de usar las máquinas y conocer cómo funcionan los instrumentos”, afirma.
Por su parte, María Camila Arias Gordillo, líder del semillero de investigación, destacó el valor formativo del trabajo colaborativo entre estudiantes y docentes, el cual es clave para la formación académica de los estudiantes, “la experiencia en el semillero nos ha permitido aplicar los conocimientos teóricos en proyectos reales, y eso ha fortalecido no solo nuestras habilidades técnicas, sino también nuestra capacidad para resolver problemas de manera creativa y efectiva”. Según María Camila, esta interacción ha sido fundamental para enfrentar los retos que propone la industria en constante evolución.
El semillero no sólo es un espacio para aprender, sino también para convivir y colaborar. Para Lloyd Morris, también estudiante de sexto semestre de Ingeniería de Manufactura, el semillero le ha permitido poner en práctica conceptos que de otra manera podrían olvidarse, “hay muchas cosas que se enseñan en las materias que puedes ver en planos o en el tablero, pero no es lo mismo tener la experiencia con piezas e instrumentación real, que son lo más cercano a lo que veremos en el mercado laboral”, comenta. Además, resalta cómo este espacio le ha permitido generar un gusto por la estandarización, un aspecto esencial en la industria, “si no medimos lo que estamos trabajando, no podemos hacer correcciones ni mejoras en los productos o procesos”.
Desde su creación, el Semillero de Metrología ha enfrentado varios desafíos, principalmente relacionados con la rotación de estudiantes y docentes, un factor común en muchos semilleros universitarios. Sin embargo, el profesor Montilla resalta que “el trabajo fue muy bonito e intenso desde el inicio, pero como sucede con la mayoría de semilleros, la rotación del personal hace que a veces haya que comenzar de cero. Aun así, seguimos adelante, y hoy en día tenemos un laboratorio de metrología dimensional con equipos novedosos para que los estudiantes los aprovechen”, señala.
Para Javier Esteban, estudiante de Ingeniería en Manufactura, otro miembro del semillero, una de las experiencias más gratificantes ha sido el trabajo colaborativo entre compañeros, “lo más bonito es que, aunque ya vienes con las bases teóricas, en el semillero te encuentras con personas muy agradables que te enseñan y aclaran dudas, lo que te permite expandir tu conocimiento”, además, destaca la importancia de la metrología en la industria, “tomar una mala medición puede generar un error muy grande, y aquí aprendemos a valorar lo que parecen pequeños detalles, pero que en realidad tienen un impacto significativo”.
Para el futuro, el profesor Montilla sueña con llevar el semillero a nuevas alturas, incluyendo la formación de metrología láser y sin contacto, así como la formación en implementación de laboratorios de de metrología certificados bajo la norma ISO 17025, “nuestro sueño es poder ofrecer un laboratorio no solo con los instrumentos, sino con todos los protocolos de calibración necesarios para cumplir con los estándares de calidad que exige la industria”, agrega.
Este semillero no sólo aporta conocimiento técnico, sino que también cultiva habilidades colaborativas y refuerza el sentido de responsabilidad en los futuros profesionales, por tal razón, María Alejandra invita a todos los estudiantes a que se sumen a esta experiencia: “Es un lugar donde no solo aprendes, sino que te encuentras con personas que comparten tu pasión por la precisión y el control. Aquí se convierte lo pequeño en algo muy grande”.